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Nota editorial        

Presentamos el segundo número del volumen 28 de la revista Quinto Sol. Es un volumen muy especial para quienes integramos el equipo editorial, porque estamos atravesando una situación crítica inédita en la Universidad Pública Argentina, sometida a una expresa campaña de desfinanciamiento y desprestigio de las Ciencias Sociales, junto con el desmantelamiento del sistema Científico y Tecnológico que está realizando el gobierno del presidente Javier Milei.

Frente a este contexto adverso, como grupo editorial y en conjunto con las demás revistas de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de La Pampa, decidimos sostener la publicación sin disponer de recursos económicos. Esta situación implica mayor recargo de trabajo para el Comité Editor, que hace sus tareas ad honorem, haciéndonos cargo de todo el proceso de edición, dado que en el caso de Quinto Sol dejamos de contar con la asistencia de personal técnico especializado en la corrección de estilo. Elegimos una tapa negra, en tonos oscuros, sin las habituales imágenes, con el fin de expresar y denunciar la situación que estamos atravesando las revistas científicas en particular y la Universidad Pública en general. El color negro, no es casual, subjetivamente denota miedo, muerte y temor. Nuestro futuro es incierto y nos preocupa el sostenimiento del derecho a la educación superior de calidad, gratuita e inclusiva en el país.

La inexistencia de partida presupuestaria para Ciencia y Tecnología impidió que contemos con el habitual diseño de la tapa y el cuerpo del interior de la revista, realizados por profesionales en diseño, por lo que decidimos editar los archivos y publicar el número con nuestras propias herramientas y la colaboración desinteresada del personal universitario. Esperemos que las personas autoras y lectoras entiendan que no somos especialistas en edición gráfica, pero nos resistimos a la desaparición de nuestras revistas de acceso libre y, con ello, a la democratización del saber. Queremos seguir sosteniendo nuestra revista porque aporta a la difusión de las investigaciones históricas y sociales gestadas en Institutos y Departamentos de organismos nacionales. Seguiremos reivindicando a la Universidad Pública, luchando por el cumplimiento de la Ley de Financiamiento de Ciencia y Tecnología y resistiendo la eliminación de nuestras publicaciones.