DOI: http://dx.doi.org/10.19137/circe-2017-2102013

 

RESEÑA

 

Martínez Astorino, Pablo
La apoteosis en las Metamorfosis de Ovidio.
Diseño estructural, mitologización y «lectura» en la representación de apoteosis y sus contextos
Bahía Blanca: EdiUNS, 2017, 394 pp. ISBN 978-987-655-080-2

 

por Laura Pérez
[CONICET/IEClas, UNLPam - lau_perez75@hotmail.com]

 

El libro La apoteosis en las Metamorfosis de Ovidio es el resultado de la investigación doctoral que Pablo Martínez Astorino desarrolló en la Universidad Nacional de La Plata y que revisó y amplió en los años posteriores a su defensa pública sustanciada en 2009. Centrado en el motivo de la apoteosis, que examina en sus variantes míticas, políticas y poéticas, el investigador lleva a cabo un análisis profundo y meticuloso de una de las obras más significativas de la literatura romana y fuente privilegiada de la mitología grecorromana a lo largo de la entera tradición occidental. La calidad del estudio y el atractivo de la temática se ven realzados si consideramos que las Metamorfosis, a pesar de haber sido objeto de una ingente producción crítica en los últimos siglos, aun presentan complejos desafíos a los estudiosos que intentan comprender plenamente su sentido y su relación con el contexto cultural, ideológico y político de su producción, durante los años del gobierno imperial de Augusto.
El volumen se abre con una “Introducción” general, en la que el autor sintetiza las principales perspectivas críticas existentes sobre el tema y explicita los criterios que guían su propio estudio. Frente a las interpretaciones que se centraban en el carácter filosófico de la temática, y a las que atribuían a la apoteosis un valor negativo en la obra mediante el énfasis en sus usos irónicos o paródicos que develarían el antiaugusteísmo del poeta, Martínez Astorino se propone realizar un estudio detallado del motivo a la luz de las últimas y, a su juicio, más adecuadas perspectivas teóricas, con el fin de mostrar el modo en que las apoteosis se integran semánticamente en sus contextos y, a través de ellas, la historia romana y los tiempos augusteos son incorporados a la dimensión poética. De tal forma, el investigador defiende el valor positivo del motivo en la obra ovidiana. En relación con esta tesis, parte de un marco teórico que se apoya sobre el concepto de “representación” de Gadamer –según el cual la obra de arte es una totalidad de sentido que debe ser entendida siempre como una afirmación– de modo de sostener que el motivo de la apoteosis, aun cuando pueda considerarse una “afirmación atenuada” (p. 15), se integra positivamente en la representación de las Metamorfosis. El otro concepto que se define como criterio de análisis en la “Introducción” es el de virtus, una idea ya establecida en su sentido heroico o político como justificativo de las apoteosis en la época de Ovidio, pero a la que este autor agrega una nueva significación al proponer una virtus de carácter poético.
A continuación, el libro se organiza en dos partes. La primera se titula“La apoteosis en la estructura de las Metamorfosis” y está dedicada a la indagación de esta temática desde dos puntos de vista: intratextual e intertextual. El capítulo “Creación del hombre y apoteosis” analiza el relato de la creación del hombre que Ovidio introduce al final de la cosmogonía en el libro I como una creación paradigmática que define al hombre como sanctius animal y destaca su vínculo con lo divino. A ella remitirán, a través de evocaciones y relaciones intratextuales, las diversas apoteosis de la obra, en las que se encuentran casi siempre alusiones a la pars inmortal del hombre o bien a la porción mortal de la que debe ser purificado, y a partir de las cuales cobra verdadero sentido el adjetivo sanctius aplicado al ser humano.
El capítulo “Modelos poéticos” destaca la importancia de dos influencias poéticas sobre la estructura del poema ovidiano, Teogonía y Trabajos y días de Hesíodo y la Égloga 6 de Virgilio, y estudia la relación entre estos modelos y el motivo de la apoteosis. Si bien en la tradición épica Ovidio contaba evidentemente con los modelos de Homero y Virgilio, Martínez Astorino postula que hay en las Metamorfosis una voluntad de filiación poética con Hesíodo, pues no solo el episodio de Pandora es una influencia importante en el relato de la creación del hombre, sino que la historia universal mitologizada que constituye el poema de Ovidio puede leerse como una continuación de la Teogonía. Mientras Hesíodo pone el acento en los dioses y héroes, Ovidio lo ubica en los hombres, al comenzar por una antropogonía paradigmática que tiende hacia una antropotélesis, i. e., la apoteosis como télos del hombre, que alcanza su culminación en el final con la apoteosis del poeta. El segundo modelo, el canto de Sileno incluido en la Égloga 6 de Virgilio, precisamente se destaca porque, además de los paralelos temáticos y estructurales con las Metamorfosis –un carmen que a través de una continuidad de historias va desde los comienzos hasta la contemporaneidad del poeta–, concluye también con una consagración poética, la de Galo, que puede leerse igualmente como una apoteosis.
La segunda parte del estudio se ocupa del “Valor semántico de las apoteosis” y se abre con un capítulo introductorio en que se explicitan los conceptos cardinales que se emplearán en el análisis: “«Lectura», «mitologización» y poesía en el estudio de las apoteosis”. Con el término ‘lectura’, el investigador se refiere a las relaciones existentes entre las distintas partes o motivos de la obra, relaciones no tan explícitas –pues se establecen mediante evocaciones, simetrías, afinidades– pero reconocibles en un examen atento y necesarias tanto para la comprensión global como para la interpretación de aspectos particulares que hacen a la totalidad de la obra. Desde esta perspectiva serán leídas, entonces, las conexiones entre las apoteosis y la historia de la creación paradigmática del hombre, así como sus vínculos con la idea de estirpe presente a lo largo del poema. Por su parte, la ‘mitologización’ es para el autor una estrategia literaria más medular que la ironía o la parodia en las Metamorfosis. Ella permite a Ovidio integrar los aspectos romanos e históricos en la dinámica mítica, al contrario de la tendencia preponderante en su época a historificar el mito o interpretarlo en forma racional o evemerizada. Esta estrategia, además, se completa con la apoteosis final del poeta a través de su obra, la poesía. El investigador asigna una importancia fundamental a esta idea para comprender el objetivo final de Ovidio: subordinar la historia y la política romana, e incluso la filosofía, al carácter transformador de la poesía.
En función de su relación con la historia de la creación, el autor seleccionó para su análisis detallado las apoteosis en que se incluyen menciones explícitas de la parte mortal o inmortal del hombre. La primera apoteosis tratada, entonces, es la de Ino y Melicertes en el libro IV, junto a la elevación de Cadmo y Harmonía transformados en serpientes, que son objeto del capítulo “Ino, Cadmo y Harmonía en el contexto de la estirpe tebana”. Martínez Astorino enfatiza las constantes alusiones a la idea de estirpe que otorgan unidad a todo el ciclo tebano y que, por medio de sus reapariciones en las partes históricas de la obra, permitirán ubicar a Tebas y su estirpe como prefiguración de Roma. Insiste además en la idea de elevación que expresan las apoteosis y en su vinculación con el tema del parentesco del hombre con lo divino desde su creación, tema que se conecta con el rol que desempeñan diversos dioses en las apoteosis y que será retomado en relación con todas las apoteosis analizadas en los sucesivos capítulos. Por último, sostiene que la omisión de las divinidades romanas en que se transforman Ino y Melicertes tiene la función de destacar el carácter griego del mito y de ubicar así a la apoteosis –en tanto esta es la primera importante en la obra– en un ámbito puramente mítico y no político o romano, de forma que las posteriores apoteosis con sentido histórico-político deberán también interpretarse como incluidas dentro de una perspectiva mítica.
La siguiente apoteosis estudiada es la de Hércules (libro IX), protagonista del capítulo “Hercules mythicus: del sanctius animal a la apoteosis y a Roma”. Este personaje continúa vinculado a Tebas, pero en su caso a las alusiones tebanas se añaden otras romanas, que acentúan el carácter de prefiguración de las figuras míticas tebanas. El autor examina las numerosas referencias a la Eneida virgiliana en este pasaje y postula que, además de añadir interés al lector que sin duda las reconocería, estas colaboran a la mitologización del héroe, es decir, a enfatizar su valor mítico por sobre el político. Su deificación, por otra parte, a la vez que remite nuevamente a la idea del sanctius animal con la mención de su pars melior inmortal, inaugura el tema de la virtus como causa de la apoteosis, una virtus heroica–la hazaña de librar a la tierra de monstruos– pero que por medio de alusiones tradicionales romanas y augusteas cobra pleno sentido y valor, lo que resulta necesario, según el autor, en vista de que el motivo de la apoteosis conserve su valor en el desarrollo posterior de la trama y en el final.
La transición a personajes históricos y romanos comienza con la apoteosis de Eneas (libro XIV) en el capítulo “Eneas, Virgilio y el motivo de la apoteosis en la «Eneida-Odisea» ovidiana”. En oposición a las interpretaciones negativas de lo que se ha denominado la “Eneida ovidiana”, que destacaban en las alusiones a la obra de Virgilio la intención paródica, crítica y el antiaugusteísmo de Ovidio, Martínez Astorino analiza los modelos literarios y las abundantes referencias intertextuales del pasaje para demostrar que este debe ser considerado más bien una “Eneida-Odisea” en la que se imbrican ambos antecedentesépicos para contribuir a la mitologización que permite al poeta apropiarse de la historia de Eneas. A la vez, la evocación de las virtudes romanas de Eneas ya establecidas en el poema virgiliano –su virtus guerrera y su pietas– sirve a la construcción de un Aeneas Romanus en función de la continuidad y el valor del motivo de la apoteosis, que en este caso se vincula especialmente a la de Hércules–mediante las remisiones a Tebas y a la estirpe cadmea–, pero anticipa el sentido romano de las posteriores.
Los procedimientos tendientes a resaltar el carácter mítico y las conexiones con la sección griega del poema resultan aún más notorios en relación con los personajes romanos analizados en el capítulo siguiente:“«Mitologización» y «lectura» en el pasaje de Rómulo y Hersilia”. El autor destaca en el tratamiento ovidiano de estas apoteosis dos estrategias: la de inventar historias romanas en base a características del mito griego y la de estructurar pasajes romanos a partir de la utilización creativa de textos de la tradición literaria griega y romana considerados ejemplares –este sería el sentido de las alusiones constantes a la Eneida y, en lo que respecta a Rómulo, a los Anales de Enio–. A ello se suma la supresión de rasgos históricos notorios –como las más controvertidas acciones políticas de Rómulo– en vista de acentuar su carácter mítico.
Los últimos tres capítulos del trabajo se abocan al análisis de los pasajes del libro XV de las Metamorfosis, que pueden leerse desde el concepto literario de closure en tanto dan un cierre a temas y motivos que habían quedado irresueltos en el despliegue de evocaciones, similitudes y conexiones a lo largo de la obra. En “Pitágoras y la ‘apoteosis’ de Roma (Met. 15, 418-452)” se examina el catálogo de las ciudades incluido en el discurso de Pitágoras con el objeto de mostrar que en el pasaje no solo hay una celebración y elevación de Roma, sino más bien –en forma alusiva– una apoteosis de la urbe. A la vez, se retoma la noción de estirpe en las relaciones que surgen entre Tebas, Troya y Roma: la primera, prefiguración y contraparte de la última; la segunda, reemplazada por Roma en una relación de continuidad. La presencia, por último, del vates profético (el adivino Héleno) y del filosófico (Pitágoras) anuncia la importancia y superioridad que cobrará al final de la obra el poeta con su propia apoteosis.
Los segmentos más evidentemente políticos de la obra y que mayor polémica han producido entre la crítica se analizan en “Las apoteosis de César y Augusto y el final de las Metamorfosis de Ovidio”. Frente al antiaugusteísmo que se ha percibido mayoritariamente en estas secciones, el investigador postula que las referencias augusteas pueden ser leídas en sentido positivo. La ironía, desde su punto de vista, aunque suele estar presente en la forma del humor o la exageración, por ejemplo, no solo no es mordaz ni destructiva, sino que nunca agota el sentido de los pasajes. En cuanto a la mitologización en estos segmentos específicamente romanos –cuyas estrategias de realización analiza–, el estudioso se opone a quienes ven este procedimiento como un elemento negativo y destructivo de la representación. Por el contrario, afirma, Ovidio se apropia por este medio de la historia y la política y las transforma en materia de tratamiento poético a fin de presentar las Metamorfosis como la mitologización de una historia universal en la que entran también Augusto y su casa. Y precisamente esa historia universal culmina –a modo de clausura de lo anunciado en el libro primero: que alcanzaría el ad mea… tempora del poeta– en la apoteosis del propio Ovidio. Una apoteosis que, por medio de una estructura literaria de priamel, se presenta como superior a las apoteosis políticas de César y Augusto y de la misma Roma, pues es el poeta, a través de su representación, quien hace posibles las demás.
El capítulo final, “La apoteosis en la sphragís ovidiana: la virtus del poeta, el sanctius animal y Roma”, continúa el análisis de este pasaje mediante su vinculación con el tema de la virtus que reaparece en los últimos versos de la obra. En relación con las hazañas heroicas de personajes como Hércules o Eneas y con la maius opus de César que es la paternidad de Augusto, la virtus de Ovidio se ubica en su propia maius opus: la representación poética de las Metamorfosis. En este sentido, el estudioso sostiene que la superioridad de la apoteosis del poeta también otorga superioridad a su obra, de modo que la virtus poética se eleva por sobre la virtus heroica o política, al tiempo que se revela como télos de la creación del hombre: el poeta es quien realiza en forma plena el sentido del sanctius animal. En definitiva, concluye, hay en la obra una exaltación de Augusto y de Roma, pero la exaltación del poeta se eleva por sobre aquellas, en tanto su virtus poetica es la condición de posibilidad de aquellas.
Las breves “Conclusiones” que cierran el libro, además de retomar y sintetizar los principales resultados del análisis, tienen el valor añadido de dar cuenta en cierta medida de las etapas y problemas en el desarrollo del proceso investigativo. El volumen se completa con dos “Índices”–de pasajes discutidos y general– de mucha utilidad para la búsqueda de temas específicos y el acceso erudito al libro, precedidos por el apartado de “Bibliografía”. Este evidencia –en la forma condensada de un listado– la amplitud y actualización de la producción crítica revisada por el investigador, con la que dialoga y debate a lo largo de todo el trabajo, ya que puede decirse que cada capítulo se inicia con un sintético ‘estado de la cuestión’ donde se presenta el panorama de las principales líneas de interpretación acerca de cada tema específico. En este proceso, cabe destacar que Martínez Astorino logra elaborar un análisis original, justificado con argumentos sólidos y basado en un exhaustivo y riguroso examen textual, que atiende a la importancia estructural y semántica del motivo de la apoteosis, sin descuidar su vinculación con la ideología augustea, ni la profunda significación poética y literaria que Ovidio expresa a través de este motivo. Propone así una interpretación convincente y sugestiva, que nos invita a una relectura del poema ovidiano desde nuevas perspectivas, a fin de reconocer las ricas y poderosas configuraciones de sentido que la obra ofrece al lector.